Por Bernd Dietz, Prima-Littera nº 11.
Acaso sea Fernánd Léger –al decir de Roger Garaudy, uno de los cuatro grandes pintores del siglo XX- quien mejor haya descrito, en su Funciones de la pintura, la estética de la máquina y el objeto que empezó a ser novedosa hace ya casi un siglo, y que, años después, al artista se le seguía antojando incomprendida por el público. Difícilmente cabría decir lo mismo hoy en día, cuando podemos estar agradecidos si la pintura sigue siendo pintura, y no “arte conceptual”, minimalismo o una “instalación”.
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