Por javier Rodríguez Marcos, El País.

Una llamada despertó este martes a Ida Vitale a la 6 de la mañana, hora de Austin (Texas). Acababa de ganar el premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana, el más prestigioso de su género y dotado con 42.100 euros. La verdad es que “despertar” es mucho decir, porque la poeta uruguaya, de 91 años, acababa “casi” de irse a la cama. Lo contó horas después por teléfono a este periódico: “Trabajo de noche y, además, me cuesta horas dormirme. Estaba en el limbo”…

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