Hoy, como cada lunes, volvemos a presentaros un ejemplo de librería que, por su labor, su oferta y sus criterios propios, constituye una excepción en el panorama nacional e internacional de las librerías literarias.
El homenaje de hoy es para la española librería Los Portadores de Sueños que, con casi una década de actividad, constituye todo un referente literario tanto para la ciudad de Zaragoza como más allá de su ámbito territorial, y ya ha sido galardonada por el Gremio de libreros Cegal, con el apoyo del Ministerio de Cultura, con el Premio Librería Cultural del 2012.
Eva Cosculluela y Félix González, los dos valientes libreros, los dos «portadores de sueños» que están detrás de esta apuesta cultural, fundaron la librería en 2004, dejando atrás su profesiones de ingenieros informáticos para dar rienda suelta a su verdadera pasión: la literatura y los libros.
Desde el primer momento Eva y Félix tuvieron claro el rumbo que querían imprimir a su propuesta librera: “Nuestro principal objetivo fue crear una librería independiente, que contara con una selección de libros similar a nuestros gustos, ya que existen numerosas librerías dedicadas únicamente a los bestsellers más vendidos, sin ningún tipo de libro definido”, explica Eva en una reciente entrevista, “Propusimos este lugar para desarrollar en él una selección muy particular y especial.”
Con sus cien metros cuadrados repartidos en dos plantas, Eva y Félix han conseguido sin duda el objetivo que se ha fijado y han logrado dar al establecimiento una atmósfera especial gracias tanto a su excelente selección de libros, al trato muy personalizado con sus lectores, como el cuidado de los elementos decorativos, por ejemplo, el hermoso sofá rojo repleto de libros que ocupa el escaparate y que se ha convertido en el emblema de la librería.
Eva y Félix son además dos libreros comprometidos con la labor que llevan a cabo, y muchas veces han cuestionado el extraño funcionamento de la denominada “cadena del libro”, en la que se supone que cada elemento de la cadena (autor, editor, distribuidor, librero) es fundamental para aportar un valor añadido al lector final, pero en la que en realidad muchas veces sucede todo lo contrario, y el término “cadena” adquiere otro matiz que recuerda más bien a las ataduras que coartan la libertad.
“Tampoco sabíamos”, admiten, “que, a veces, conseguir un libro es poco menos que misión imposible. No imaginábamos los quebraderos de cabeza que nos iba a dar la distribución: las librerías somos lo que en términos empresariales se denomina ‘clientes cautivos’. Esto quiere decir que cada editorial tiene un distribuidor en tu zona, y si quieres un libro suyo estás obligado a comprarlo al único proveedor que lo vende. En algunos casos, no pasa de ser una situación molesta que genera más trabajo para el librero. Pero en otros va más allá de ser una simple molestia. Si el único canal de distribución de una editorial decide no venderte sus libros, tienes un problema. Y si esa editorial es una de las más importantes de este país, sus libros aparecen publicitados continuamente en los medios y reseñados en los suplementos literarios, el problema es mayor. Y es extraño, porque lo único que queremos es comprar libros a unos señores que supuestamente se dedican a vender libros.”
Desde aquí, nuestros mejores deseos para la librería Los Portadores de Sueños y para sus lectores.
Que tengáis buena lecturas…