Los aires literarios traen hasta las ferias del Libro -acaba de inaugurarse la de Madrid y es inminente la apertura de la sevillana- las novedades capaces de atraer a millones de lectores. No sólo los títulos se traducen en cifras innumerables, sino que su diversidad es tal que los más variados gustos quedarán satisfechos. La selección es obligada, pero las posibilidades de hallar brillantes muestras de la inteligencia humana es un hecho incontrovertible. Hay libros en los que uno puede hallar el torbellino de la imaginación, la ráfaga del ingenio, el hálito del pensamiento.

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