La voluntad de ocultarse bajo la máscara de las palabras es también el recurso que utiliza José Jiménez Lozano, quien, aunque reconoce escribir diarios -y “no siempre de cara a un libro”-, precisa que son más bien apuntes “para no olvidar impresiones, paisajes, cuestiones de interés, hechos políticos…, en los que vuelco el ánima”.